COP 27 acuerda la creación de un fondo económico en 2023 para compensar a países que sufren los impactos del cambio climático

Un acuerdo insuficiente. Esa es la sensación que dejó la vigésimo séptima Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC). Tras dos semanas de negociaciones, el principal acuerdo fue la creación de un fondo económico para compensar a los países impactados por el cambio climático por las pérdidas y daños que están sufriendo. Sin embargo, no se tiene mayor avance con respecto a la transición energética y el abandono progresivo de los combustibles fósiles, principales causantes del cambio climático.

Para muchos, fue un importante avance la inclusión de las palabras «combustibles fósiles» en el Pacto de Glasgow, como se conoce ahora al documento final de la COP26. Con este antecedente, se esperaba obtener un resultado más ambicioso durante la COP 27, donde se establezcan los parámetros para el abandono progresivo de este tipo de combustibles. Sin embargo, nada similar se encuentra en el documento final. Tan solo se llama a reducir gradualmente el uso del carbón. Rusia y Arabia Saudita fueron los principales opositores a incluir este punto en el documento final.

Con esto se pone en riesgo la meta de 1,5 ºC, establecidas en el Acuerdo de París. Algunos países incluso habrían presionado para retirarlo del acuerdo y quedarse solo con el umbral de 2ºC, lo que para muchos científicos y activistas es inaceptable.

Para algunos, la COP 27 será recordada como un fracaso. Aunque se acordó crear el fondo para pérdidas y daños, la negociación sobre como financiar este fondo se dará recién el próximo año, durante la COP 28. Por otra parte, gracias a la guerra de Rusia y Ucrania, los países productores de combustibles fósiles han ganado un posicionamiento que no tenían antes. La ambición de muchos países se redujo, por el temor de los aumentos de los precios de energía y el costo de vida.

Fuente: OjoPúblico, The Conversation