Mediante dos pronunciamientos, las comunidades quechuas y kichwas del Lote 192 organizadas en las federaciones FEDIQUEP y OPIKAFPE reclaman al Estado peruano acciones urgentes vinculadas a la seguridad de sus territorios y atenciones ante emergencias de salud y ambiente. Los pronunciamientos surgen en pleno proceso de consulta previa del Lote 192, donde el Estado y comunidades indígenas dialogan en torno a 30 años más de actividad petrolera en territorios que han sido sistemáticamente afectadas por cinco décadas de explotación.
Los pronunciamientos coinciden en exigir al Viceministerio de Hidrocarburos que rechace el proceso de consulta previa del Lote 192 y la propuesta de Plan de Abandono del Lote 1AB de la empresa Pluspetrol. La empresa mantiene su posición de no remediar los sitios contaminados.
De otro lado, las comunidades kichwas reclaman también respuesta inmediata al compromiso asumido por el Viceministerio de Salud Pública y el Viceministerio de Hidrocarburos, mediante el cual se instalaría un Módulo de Contingencia de Salud para atender a las comunidades kichwas. Al respecto, las comunidades exigen que las autoridades “oficialicen y nos aseguren el mecanismo formal y el presupuesto necesario para la instalación de Módulo de Contingencia que se han comprometido”, y precisan que “también se debe asegurar las plazas y el personal de salud que atenderán el módulo, así como el abastecimiento necesario para su funcionamiento”.
Otros puntos incluidos en los reclamos están la atención urgente de Perupetro frente a los recientes derrames ocurridos en el Lote 192; y a la PCM por la realización de una reunión del Grupo de Trabajo Multisectorial en sus territorios, algo que se viene arrastrando desde el año 2015.
Por otra parte, también se denuncian las malas prácticas de la empresa encargada del proyecto de la carretera Iquitos-Saramiza, en el distrito de Tigre. Denuncian que la empresa ingresa a las comunidades mediante engaños. Las comunidades han advertido que serán drásticas frente a operarios que ingresen a sus territorios. Las comunidades rechazan categóricamente este proyecto, pues según indican afectan sus chacras, animales y comunidades. “Por culpa de este proyecto, que no nos han consultado, se nos va a despojar del territorio, y de ser dueños vamos a terminar siendo pasajeros, limosneros. Por culpa de esa carretera vamos a tener más conflictos y problemas, además de quedarnos sin chacra y reservas para nuestros niños y niñas y futuras generaciones”.
Fuente: Observatorio Petrolero