
Los indígenas wampís y achuar del norte de la Amazonía peruana celebraron el anuncio de la empresa petrolera GeoPark, de origen chilno, de renunciar a la explotación del Lote 64 tras la férrea oposición de los pueblos nativos a la actividad extractiva en sus tierras.
El Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW) calificó de «victoria indígena» la retirada de la empresa y consideró que tanto ellos como los achuar «han sentado públicamente sus compromisos por la conservación de los territorios de vida y el respeto a la dignidad humana».
La “decisión irrevocable” de GeoPark a retirarse el Lote 64 se debe a “razones de fuerza mayor”, según informó la empresa. La estatal Petroperú, que era socia de GeoPark en este proyecto, detalló que la razón es que no se ha aprobado aún ningún estudio de impacto ambiental (EIA) para operar en la zona.
En junio de 2019 GeoPark desistió ante las presiones de las organizaciones indígenas de seguir adelante con la propuesta del EIA que era evaluada por las autoridades nacionales de Perú. El EIA había sido observado en marzo por el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace) por no precisar los pasivos ambientales ni la delimitación de las áreas de influencia directa e indirecta del proyecto, así como la situación cultural actual de las comunidades nativas de la zona.
La renuncia de GeoPark llega pocos días después de que los wampís denunciasen a la empresa penalmente por considerar que puso en riesgo a varias comunidades al movilizar dentro de sus territorios y sin permiso de ellos a trabajadores durante el periodo de confinamiento nacional decretado por la COVID-19.
Ahora la estatal Petroperú se ha quedado sola en el Lote 64, y en los próximos días anunciará sus nuevos planes, ya sea buscar un nuevo socio, asumir el proyecto íntegramente o desistir por el momento de este yacimiento.
Los planes de GeoPark y Petroperú eran iniciar la producción de petróleo en el segundo semestre de 2019 con 6,000 barriles al día para después aumentarla progresivamente durante los siguientes siete años hasta los 55,000 barriles diarios. Las reservas probables del yacimiento se estiman en unos 200 millones de barriles de crudo.
«No importa cuánto tiempo insistan para entrar a nuestro territorio. Nunca vamos a permitir el ingreso a empresas petroleras. Ya tenemos experiencias previas (en otras zonas de la Amazonía) donde ríos y animales han sido contaminados», dijo Nelton Yankur, presidente de la Federación de la Nacionalidad Achuar del Perú (FENAP).
Con información de Gestión